El pasado 15 de Junio, Domingo de la Trinidad, como manda la tradición, los romeros de Jaca emprendieron su marcha hacia Yebra de Basa, y tuvimos el privilegio de acompañarlos en parte del trayecto. Recorrimos juntos el antiguo camino del pastor, esta histórica ruta, que según la tradición fue recorrida por el pastor Guillén de Guasillo en el siglo XI para trasladar los restos de Santa Orosia desde el puerto de Yebra hasta Jaca, y que ha sido recuperada en tiempos recientes como un sendero de peregrinación y senderismo.
A cada paso, entre cantos y silencios, se respiraba el espíritu de la romería: caminar como acto de devoción, como gesto de comunidad. El camino del pastor no es solo una vía de paso; es también una experiencia compartida, un hilo que une generaciones y pueblos con una misma promesa.
La llegada a Yebra siempre emociona, pero este año, como cada año, el encuentro fue especial. Los romeros, fieles al legado que custodian, trajeron consigo el latido de una tradición que sigue viva gracias al compromiso y la entrega de quienes la hacen posible.
Seguimos caminando, con Santa Orosia como guía.
Nos vemos en el Puerto.